IGG-2024-020. Causas de la decadencia militar romana y lecciones para el presente.
- Título: IGG-2024-020. Causas de la decadencia militar romana y lecciones para el presente.
- Autor: Gaius Albius Scaeva
- Publicación: 05/08/2024
- Idioma: Español
- Departamento: Departamento de Historia
- Bibliografía: Albius Scaeva, Albius. (2024). “IGG-2024-020. Causas de la decadencia militar romana y lecciones para el presente.” Publicado el 5 de agosto. Instituto Georgios Gemistos.
- Resumen: Se analizan las posibles causas de la decadencia militar romana que llevó al colapso del Imperio tanto en Occidente como en Oriente, al mismo tiempo se intenta proponer varias medidas para evitar este tipo de situaciones en Tarevia.
Lo más importante en una legión romana era la disciplina. Sin ella, no se podría haber obtenido victorias fundamentales en la historia de Roma, como la de Zama, las guerras en Dacia o mantener el control en las fronteras con los partos durante siglos.
Las legiones no dieron muestras de debilidad hasta el saqueo de la capital en el 410 después de Cristo.
A partir de entonces, se sucedieron numerosos análisis para explicar cómo las legiones habían sucumbido. Vegecio sostuvo que la pérdida de disciplina y una creciente relajación en el entrenamiento de los soldados fue el motivo. También analizó cómo la integración de tropas bárbaras fue un factor que diluyó la eficacia en el ejército romano.
Dicho esto, situémonos en el contexto histórico para comprender mejor la decadencia. Estamos en un periodo en que había constantes asedios fronterizos, sobre todo por visigodos y vándalos. También tenemos la Batalla de Adrianópolis, en el 378 después de Cristo, donde por primera vez los visigodos lograron una victoria muy contundente contra Roma.
Llegados a este punto, a nuestro parecer, contra el criterio mayoritario de otros historiadores y analistas, la división del Imperio en el 395 después de Cristo fue pésima para el porvenir. Al descentralizar los recursos, se debilitó la cohesión interna romana, también así la eficacia de los movimientos de tropas. Esta división se produjo porque había una crisis económica importante, por las campañas militares permanentes y el gasto exorbitado en obras públicas.
Este tipo de situaciones llevaron a Roma a una dependencia cada vez mayor respecto de soldados bárbaros. Aunque quienes integraban las tropas y la ciudadanía romana eran personas que admiraban el Imperio, indudablemente carecían de una debida lealtad patriótica, esto contribuyó de forma decisiva a la erosión de la capacidad militar.
Lo que podemos aprender de la experiencia romana sobre todo en su periodo decadente, es la importancia de fijar un programa de educación cívica, haciendo que los ciudadanos interioricen una pertenencia y responsabilidad cívica con la sociedad.
También se destaca la importancia, en contra de las tendencias crecientes a día de hoy en Europa y Estados Unidos, de desplegar políticas universalistas, tendentes a integrar minorías y nuevos ciudadanos, pero asegurándose al mismo tiempo que aprenden, comprenden e integran en sí mismos los valores comunes de lealtad hacia las tradiciones y legislaciones del país.
El exceso en gasto público es algo palmario en la historia de Roma, también determinante cuando analizamos su decadencia. Todo país que se precie de ser sostenible debería indudablemente evitar gastos no esenciales garantizando así una gestión de recursos disponibles responsable.
También tenemos otro ejemplo en la dependencia excesiva en sectores económicos concretos, sin poder hacer una planificación industrial para diversificar los ámbitos de la producción nacional.
El análisis de Vegecio resulta igualmente muy contemporáneo. Es una época de relajación cada vez mayor tanto en lo ético como en lo estético, sobre todo en las sociedades occidentales. Es necesario mantener siempre medidas muy estrictas, tanto en la disciplina funcionarial como en la transparencia de la administración pública, para evitar que la corrupción o la vagancia vayan relajando la sociedad.
Los constantes conflictos fronterizos de Roma con todos sus vecinos son una clara señal de la importancia a la hora de mantener relaciones adecuadas con otras naciones. Lo importante es para empezar no hacer injerencia en los asuntos internos de otros países, teniendo una visión de cooperación internacional, pero sin que ello suponga dejar de lado las alianzas o el apoyo mutuo con aquellos países y organizaciones que comparten valores, tradiciones e intereses.